El grupo de amantes de la motocicleta se presta a distintas actividades benéficas.
Pocas veces un nombre puede ser más descriptivo, aunque quizás los Moteros Solidarios de Galicia podrían apostillar aquello de amigos y residentes en Ourense. Su presidente, Juan Carlos Blanco, recuerda que nacieron hace algo más de año y medio, después estar ligados a otro club que no cumplió las expectativas de los actuales miembros: «Nuestro fin principal, además de disfrutar de la moto, es echar una mano en lo que podamos, ayudar en lo que sea necesario, somos una veintena de socios en esta provincia, pero hay más personas implicadas que también arriman el hombro cuando una iniciativa nos desborda».
Y es que el distintivo del grupo ya es conocido en las carreteras autonómicas. Lo utilizan sus integrantes cuando conducen sus vehículos y también otros colabores sin moto que han decidido unirse al colectivo. «Hasta tenemos dos socios de honor que se ponen el chaleco muchas veces, Yosi de Los Suaves y su mujer, Laura. Incluso han participado en algunas de nuestras acciones benéficas».
La indumentaria, aún siendo un toque identificativo que no deja de ser pintoresco tampoco es una barrera que antepongan en la asociación para participar en sus proyectos. Pero la imagen del clásico motero ya se ha visto vinculada en Ourense a la Cabalgata de Reyes de hace dos años, a la entrada de Papá Noel en las guarderías y hasta a la llegada de los Magos de Oriente a una cita tan arraigada en la sociedad local como la de Pazolandia.
Precisamente con esa ilusión de los más pequeños está vinculada el próximo objetivo de los Moteros Solidarios, la Recogida de juguetes en favor de las casas de acogida de la provincia, en la que el propio Juan Carlos admite que se volcarán hasta el próximo 15 de diciembre: «Hasta esa fecha será nuestra prioridad, es una meta en la que representamos a Galicia dentro de un movimiento de carácter nacional, aunque en cada autonomía le ponemos nuestro propio sello. En nuestro caso, nos preocupamos mucho de que los juguetes sean de una buena calidad, porque a veces la gente confunde la beneficencia con vaciar su trastero y tampoco es eso. Si tenemos que hacer alguna reparación, la hacemos, pero lo importante es que los niños puedan disfrutar de juguetes en esas fechas».
Los propios moteros son los encargados de realizar la entrega para encandilar con el rugido de sus máquinas a sus pequeños beneficiarios, muchas veces incluso más impactados por la máquina que transporta su regalo que por el presente en sí que van a recibir. Es una motivación que Blanco y sus compañeros ponen en primer lugar de su baremo colaboracionista, ya que la iniciaron antes incluso de la fundación del club: «Este será el tercer año y lo seguiremos compatibilizando con otras recogidas, porque prácticamente somos el brazo de Banta (Banco de Tapones) en Ourense. Tenemos una red muy extensa y nos hicimos con los de la Residencia. Los trasladamos cada mes y en el pasado teníamos nuestro local hasta los topes, llenamos dos furgonetas».
Sin duda, el cliché del chico malo se aleja del perfil de estos moteros ourensanos que amplían su manto en dirección a Vigo y también disponen de una abogada para asesoramiento en temas de maltrato y un psicólogo infantil, con la intención ofrecer charlas en colegios y contribuir a frenar los casos de acoso escolar. El perfil del grupo es de lo más heterogéneo, desde informáticos a funcionarios y el único filtro que le ponen a las nuevas incorporaciones es el de no cargar con antecedentes penales. Por lo demás, la consigna es ayudar donde hagan falta dos manos: «Hace poco un párroco nos comentó que tenía una furgoneta de víveres sin descargar para los más necesitados y hasta allí nos fuimos». En moto, claro está.
Sede. Moteros Solidarios de Galicia tiene su local en la calle Peña Trevinca, 29, bajo. Cuentan con compromisarios de entre 20 y 60 años de edad. Socios de Honor. Yosi, cantante de Los Suaves, y su mujer, Laura, fueron distinguidos con los chalecos del club.
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