Honda y Marc Márquez están en un laberinto por culpa de una moto construida alrededor de un motor nuevo al que no se han acoplado. La Honda acelera mal con lo que deben recuperar en frenada; eso los obliga a montar goma dura, que tiene menos agarre y estabilidad y facilita las caídas.

Básicamente, la RC213V acelera mal, sobre todo, en el primer golpe de gas, cuando salen de la curva. Esto hace que las Yamaha, las Ducati y hasta las Suzuki sean mejores en ese apartado. Para compensarlo, sólo los queda frenar más tarde que sus rivales. Pero, para ello, tienen que montar el neumático más duro delante, pues, de lo contrario, lo destrozarían temprano. En el caso del ilerdense, además, toda su confianza se basa en esa gestión de la parte delantera.

HRC sabe que las caídas no vienen porque sí

Marc Márquez, piloto Repsol Honda

Pero, al verse casi forzados a usar el compuesto más duro, la Honda tiene menos agarre y es más inestable. Esto aumenta las opciones de caída. Es un círculo vicioso, la pescadilla que se muerde la cola.

Aprendiendo de los errores

Tras Losail, Marc dijo que habían errado al no poner el duro. En Termas, antes de la carrera, cambió. Dijo que con él se podrían haber caído y que fue un acierto montar el medio. El domingo volvió al planteamiento inicial: “Está claro que me habría gustado hacer las dos primeras carreras como Viñales, ganarlas las dos. Eso sería mucho mejor, pero no ha podido ser. En Argentina me caí; en Qatar, cuartos. En Qatar pequé de prudencia. En Losail he arriesgado con el neumático duro de delante, que era la elección que tocaba. Una caída penaliza mucho y estoy arrepentido de ella, pero hay que saber pasar página, aprender de este error. Quedan muchos puntos y carreras”.

Solución electrónica

¿Y cómo arreglarlo? ¿Cómo encontrar el hilo para salir del laberinto? El año pasado, en una situación técnica parecida por la falta de aceleración, lo arreglaron con la electrónica. Con esa gestión lograron que la moto fuera más estable en frenada, incluso al parar la moto en menos metros. Por supuesto, ahí pone el foco HRC, pero cuesta, lleva tiempo. En 2016, Márquez construyó un colchón de puntos por los errores ajenos al comienzo, pero ahora es al contrario. Más presión para los ingenieros.

Sin paseos

Así, el pentacampeón está abocado a mirar a la fábrica. “Honda está trabajando al cien por cien. Saben que han de seguir mejorando. Saben que las caídas de los pilotos de Honda no vienen porque sí, no porque nos estemos paseando, pero Honda son los primeros interesados para dar ese paso adelante”, recalca.

Sin avisar

Lo peor para sus pilotos, es que sus caídas vienen casi sin avisar. Ni Marc ni Pedrosa sabían por qué se fueron al suelo. Crutchlow lo explica: “Cuando la moto se mueve un poco es más fácil perder el tren delantero”. Y se mueve mucho, como certifica Dani: “Tenemos que hacer que la moto sea más estable”.

En Termas, mejor

Por suerte para Honda, parece que en Termas sufrirán menos. No por su larga recta, sino porque hay muchos cambios de dirección y la moto es ágil. Pero la salida está lejos.

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